Tapones auditivos
Los tapones auditivos son dispositivos diseñados para insertarse en el canal del oído y que se conviertan en una barrera que bloquee el ruido perjudicial. Son muy económicos y prácticos.
Casi todos los tapones para los oídos atenúan unos 20 o 25 decibeles, aunque algunos llegan a atenuar más de 35 decibeles. Los decibeles es la unidad de medida de la intensidad del sonido, y el oído humano no soporta por encima de 80 decibeles.
Comprar tapones para los oídos
Si se está en una situación de exposición a ruidos molestos que no son constantes, sino más bien esporádicos, bien sea por razones laborales o de otra índole y no hay manera de evitarlo, hay que comprar tapones para los oídos. Si la intensidad del ruido es de hasta 70 decibeles, lo ideal es adquirir tapones auditivos, ya que son prácticos y económicos.
Hay que saber que hay varios tipos de tapones auditivos, cada uno con características específicas y se debe elegir de acuerdo a cada caso, veamos:
Espuma
Los tapones de espuma son muy baratos y se consideran desechables, la mayoría atenúa unos 25 dbs, pero hay algunos que llegan a atenuar hasta los 37 dbs.
La colocación de estos tapones de gomaespuma requiere cierta técnica: se comprimen con los dedos, enrollándolos, se coloca el tapón en el canal auditivo, para lo cual se abre el oído jalando la oreja hacia atrás, una vez que esté en su lugar se suelta y la espuma debe expandirse hasta ocupar todo el orificio, bloqueando el sonido.
La espuma se adapta por su naturaleza a la forma del canal auditivo y por lo poroso del material, el bloqueo del sonido es muy eficiente.
Los de espuma son tan confortables que la persona muchas veces olvida que los tiene puestos.
Silicona
Estos son los tapones auditivos lavables, fabricados en silicona por ser un material antialérgico que es confortable para el oído. El tapón de silicona para los oídos tiene una forma particular que favorece su inserción en el conducto y su permanencia en el lugar. Se coloca haciendo presión hacia adentro hasta que quede sujeto y bloquee el sonido. Tienen un cordón que mantiene unidos a ambos tapones.
Triple sellado
Los triple sellado son los tapones de silicona que tienen una forma anillada, que consiste en tres círculos que aseguran el sellado del canal auditivo. Tienen forma cónica. Se colocan presionando el tapón hacia adentro del oído hasta que quede fijo. Son de excelente calidad, lavables y muy eficientes.
Vienen con un cordón de seguridad que no permiten que se caigan y pierdan, y además se pueden colgar de los hombros.
El lavado se realiza con un producto especial que evita que se contamine y que el oído reciba bacterias indeseadas.
Aro
El tapón de aro se trata de un aro rígido que sostiene los tapones auditivos de manera que se pueden dejar descansar en el cuello cuando no se están usando, y cuando se usan ejercen la presión necesaria para que el oído quede sellado.
Los tapones de aro para los oídos son ideales para situaciones donde el ruido al que se está expuesto es intermitente o de muy corta duración. También cuando el nivel de ruido se encuentra apenas por encima del nivel tolerable.
Su ventaja es que la rigidez del aro permite los movimientos de la persona sin que los tapones se muevan de su lugar, el material es hipoalergénico y la atenuación del ruido es de unos 20 dbs.
¿Cómo escoger los mejores tapones auditivos?
El criterio para decidir qué tapones elegir tiene que ver con la frecuencia de la exposición al sonido y el tiempo que dura ésta. Veamos algunos ejemplos:
Si se trata de una exposición breve y esporádica, por ejemplo, el supervisor de una planta que debe ir al cuarto de máquinas una vez al mes y en esa visita solo permanece unos 5 minutos, entonces lo ideal son los tapones de espuma desechables. Estos tapones son muy baratos, luego de su único uso se descartan.
Si el caso es de un trabajador que acciona una máquina una vez al día y el ruido dura pocos minutos, entonces los tapones de silicona son lo ideal, ya que se pueden higienizar y utilizar muchas veces. Además, se pueden retirar con facilidad y volverlos a colocar cuando se necesite.
Si el ruido que se experimenta está apenas por encima del límite y solo causa disconfort, pero se experimenta todo el día, entonces se puede elegir los tapones de aro, que atenúan el ruido suficientemente y además se los puede quitar y poner a conveniencia.
¿Cuáles son los mejores para mí?
Para elegir los mejores tapones auditivos, hay que analizar las circunstancias y también las preferencias personales. Lo que para algunas personas es tolerable para otras es insoportable, por lo tanto, es importante elegir la protección perfecta para la persona particular.
Los tapones auditivos de espuma son muy cómodos y eficientes, pero no pueden ser lavados, lo que implica que son de un solo uso. Además, deben ser tocados con los dedos para poder insertarlos, lo que puede ser inconveniente en ambientes poco aseados, donde se dificulte el lavado de las manos.
Los de silicona son más rígidos, lo que puede ser incómodo para algunos, pero proporcionan un poco más de atenuación del sonido. Los de silicona a la medida son los más cómodos, si hay sensibilidad con los demás tapones es bueno considerar mandar a hacer unos especialmente.
Los tapones de aro son muy convenientes para ambientes con sonidos intermitentes y no tan intensos.
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Es determinante que el equipo de protección que se adquiera esté pensado para la situación específica y que el resultado sea que la exposición al sonido sea atenuada a límites saludables.